El cuerpo solo absorbe y emplea una alguna proporción de nutrientes de los alimentos y suplementos que consumimos. El resto, verdaderamente, se desecha. Por este motivo es primordial poder explotar cada nutriente que consumimos al límite. Este aprovechamiento cambia de un individuo a otra en función de de qué manera responda su organismo y del producto consumido al pasar por el sistema digestivo del cuerpo.

Tomar suplementos liposomales puede ser bueno en la situacion de ciertas situaciones, por servirnos de un ejemplo, para contrarrestar la falta de alguna vitamina o mineral. Dicho de otra manera, los suplementos liposomales forman un avance en el modo perfecto de administración de suplementos. Esto se debe a su desarrollo de elaboración a través de la encapsulación de vitaminas, minerales u otros elementos en liposomas que tienen la posibilidad de ser presentados en distintos formatos: tabletas, jarabes, cápsulas, etcétera.

Si bien, no obstante, su mayor beneficio es que los suplementos liposomales proponen una mejor absorción en el organismo. Esto quiere decir que sus elementos activos “no se van a perder en el sendero”, como pasa con suplementos en otro género de muestras.

Los suplementos liposomales proponen algunas virtudes propias de la microencapsulación:

• Protección contra rayos UV, calor, oxidación, ácidos y bases, entre otros muchos.
• Mayor vida útil merced a la prevención de la humillación (deshidratación, oxidación).
• Mejor procesamiento, textura y menor desperdicio de elementos.
• Manipulación tanto de líquidos como de sólidos.
• Liberación dominada y apuntada de los elementos activos.
• Oportunidad de combinar compuestos incompatibles.

En la DietBox de Navidad hemos incluido la Curcumina liposomial Sundt, un suplemento liposomial vegano, sin gluten ni azúcares y libre de organismos genéticamente editados (OGM). Merced a su forma liposomal, tiene una mayor biodisponibilidad, lo que le deja desplegar óptimamente sus características antioxidantes y regenerativas.